Si eres amante de la decoración vintage y quieres redecorar tu hogar, Nosotras recomendamos el estilo shabby chic que tiene su origen en las elegantes casas de campo inglesas donde se mezclaban los elementos antiguos con otros más actuales. Este estilo vintage se convirtió en el antagonista principal del pop victoriano que fusionaba piezas de la época, pero añadiendo toques mucho más atrevidos.
Shabby en inglés quiere decir desaliñado o desgastado, mientras que chic es elegante o distinguido, y es por ello que en este estilo decorativo se fusionan elementos antiguos mezclados con otros más modernos, lo que tiene como resultado aportar a las estancias un aspecto mucho más moderno.
El color que predomina en el shabby chic es el blanco que se puede utilizar para elegir los accesorios de decoración al igual que para las paredes, de esta manera se aporta mayor amplitud a las habitaciones del hogar. Otros colores que predominan en esta tendencia decorativa son el beige, el rosa, el verde o el azul muy claro, estos tonos deben ir combinados siempre con el color blanco. Para crear un estilo vintage nunca se deben utilizar tonos oscuros para no ensombrecer los espacios.
Los muebles pueden ser de hierro o madera. Por ejemplo, se pueden elegir cabeceros de cama realizados en hierro, muebles y armarios de madera. Para adquirir estos elementos vintage lo mejor es acudir a las tiendas de antigüedades, en caso de que no se tenga la oportunidad de acudir a una, se pueden utilizar muebles normales y usar la técnica del decapado.
Respecto a los tejidos y textiles, los estampados con flores son los preferidos, y los tonos deben ser pasteles, suaves y el blanco no puede faltar. Los complementos vintage propios del estilo shabby chic son los juegos de té o café que aportan un toque muy personal, clásico, elegante y principalmente antiguo. Otros complementos que combinan a la perfección son los jarrones antiguos con flores como las rosas, velas, cortinas grandes y cojines.
Imágenes: blogspot/carolinaperin